Bendigo el momento en que Thetahealing llegó a mi vida y Chelo Blanco Instructor ha sido una luz en mi camino, gracias por sus talleres, consejos personales , Meditaciones y por estar recordándonos día a día, el camino a seguir, para nuestra felicidad física y nuestra evolución espiritual.
Vivo en la Provincia de Neuquén, en la Patagonia Argentina. América del Sur.
Quiero dejar mi testimonio para mi MASTER THETAHEALING Chelo Blanco, a quien conocí por causalidad, en dos meditaciones en su página y a continuación, tuve el placer de recibir la formación, del Taller ADN Básico en la ciudad de Córdoba, Argentina, con cinco compañeras más.
El cambio que se produjo en mi vida, es ESPECTACULAR, gracias al Padre-Madre. Si hay algo importante en el HOY, es trabajar en la mirada Interior de cada persona, para recibir la LUZ DE DIOS. Amarte, acariciarte, tener abundancia, energizarte, sanarte, enriquecer la vida con Amor y Paz, hacer realidad todo lo que deseas en tu vida, ayudarte y ayudar a otras personas.
Estaba tan decepcionada, tan deprimida, que ya había tirado la toalla, tenía una enfermedad degenerativa, a nivel muscular y óseo, diagnosticada como “Romberg” que me había hecho, durante largo tiempo, permanecer en cama, sin valerme por mi misma. Un día entre en una pagina y oí, como un señor, le daba las gracias a Chelo, por su ayuda, sin pensarlo, le envíe un mensaje, explicándole mi problema y que había agotado, todas las vías, por la medicina convencional, ella, en ese momento, se encontraba en México, trabajando.
Mis dolores de cabeza y cara eran tan enormes que me impedían realizar ningún tipo de actividad.
Chelo se interesó por mi problema y mantuvimos largas charlas, a mi, todo lo que me contaba, me sonaba a nada, ni vidas pasadas, ni Ho.Hoponopono, ni nada, comencé sus instrucciones, en principio, me hizo, una Limpieza de Alma, para que pudiera aceptar, la sanación que me iba a enviar, comenzó por hacerme, dos terapias de reiki a distancia, todos los días, insistiendo que era importante que paralelamente, a la sanación que me hacía, debía realizar un trabajo importante conmigo misma, de reflexión, toma de Conciencia, trabajar con el Ho.Oponopono, observar mi forma de pensar, de hablar, etc., poco a poco fui, cambiando y encontrándome mejor, recuerdo el primer día que salí sola a dar un paseo